México lleva invertido más de un billón de dólares mexicanos en la financiación de estudios de postgrado en el extranjero, para jóvenes con talento que nunca regresaron a su país de nacimiento. El coste de la financiación de esta formación asciende al 25% del presupuesto del ministerio de educación.
Las mejoras salariales, los recursos tecnológicos de las empresas extranjeras, la oportunidad de trabajar en centros de investigación e innovación… son algunas de las razones por las que los jóvenes talentos mexicanos no regresan a México a desarrollar su talento profesional.
El 66% de estos profesionales reside en EEUU, el 26% en Europa y el resto se reparte entre Canadá y otros países. En la actualidad se estima que más de 570.000 profesionales y académicos mexicanos desempeñan su trabajo en el extranjero. Alrededor de 20.000 mexicanos buscan de manera anual trabajo altamente cualificado lejos de las fronteras de su país natal.
Esta “fuga de cerebros” representa una seria amenaza para el desarrollo del país donde de cada 5 profesionales mexicanos con una titulación a nivel de máster y 3 a nivel de doctorado existe otro mexicano con esta misma titulación en EEUU.
La inversión privada y pública en I+D+i es clave para poder retener el talento en el país. En 2010 se destino un 0,5% del PIB a la investigación; 0,4 % correspondía a los fondos públicos y un 0,1% al sector privado.
La medía de gasto en I+D+i en los países de la OCDE es de 2,8%, aunque este organismo aconseja una inversión cercana al 4% del PIB, equivalente a 8 veces la inversión porcentual de México.
La academia de la ciencia Mexicana ha proyectado tres escenarios para alcanzar una inversión del 1% del PIB;
2012 escenario deseable
2018 escenario alternativo
2027 escenario inercial.
El año pasado la OCDE en sus políticas de innovación para el país mexicano recomendó las siguientes medidas urgentes:
Desarrollo de nuevas políticas de innovación como estrategia para mejorar la competitividad de las empresas mexicanas.
Mejora del sistema de innovación del gobierno mexicano.
Aumento del gasto público en I+D+i.
La OCDE también recomendó al gobierno mexicano la creación de un ministerio de ciencia como elemento clave para el desarrollo del país.
Un año después de estas recomendaciones el gobierno mexicano a creado el programa de estimulación para la innovación que se subdivide en la creación de tres diferentes organismos:
INNOVA PYME .- Innovación tecnológica de gran valor añadido.
PROINNOVA.- Desarrollo e innovación en tecnologías precursoras.
INNOVA TEC.- Innovación tecnológica para aumentar la competitividad de las empresas.
Por otro lado el instituto de los mexicanos en el extranjero ha creado un red de expertos para promocionar el talento mexicano en las disciplinas de la nano y biotecnología y tecnologías de la información. El objetivo es introducir a las pequeñas y medianas empresas mexicanas en el mercado global e impulsar así el talento mexicano.
Esta estas propuestas pretenden contribuir en el desafío de paliar la fuga de cerebros mexicanos, convirtiendo esta amenaza en una oportunidad para competir en la era de la globalización.
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